Hay amistades que parecen imposibles, pero lo cierto es que son tan fuertes que podrían mover montañas… y derretir corazones. Un buen ejemplo es la amistad, tan bella como poco común, entre Ingo, un perro pastor, y el búho Poldi.
Nunca se nos habría ocurrido que un búho y un perro se podrían convertir en mejores amigos, hasta que conocimos a estos dos. Especialmente cuando vimos estas sorprendentes y adorables fotos de Tanja Brandt, una fotógrafa de animales profesional y artista del collage en Alemania.
En ellas, comprobamos que los dos animales parecen muy contentos de poder acurrucarse el uno junto al otro en las sesiones fotográficas que realizan, bañados en la dorada luz vespertina. Si te gustan estas imágenes, no te pierdas la web de Brandt, ya que Ingo tiene muchos más amigos más.
¿Qué os ha parecido?