Lo que se ve a diario en Instagram no es la vida real, vidas perfectas repletas de viajes, amor y amistad sin ningún “pero”, pero existe una gran diferencia entre Instagram y la realidad. Kai Bottcher es un fotógrafo quien aprovecha los ángulos y la luz para que sus instantáneas sean únicas.
Pero él también quiere enseñar su trabajo final y lo que hay detrás de las cámaras para demostrar que no es todo tan perfecto como parece: