¿Tiene importancia el lugar que ocupa un niño entre sus hermanos? La respuesta es que sí, a pesar de las mejores intenciones de los padres.
Porque aunque estos siempre afirman que se quiere a todos los hijos de la misma manera, esto es imposible. Y es natural.
Por supuesto que no quiere decir que se quiera “más” o “menos” a uno que a otro. Se trata simplemente de una cuestión de matices, no de cantidad.
Por ejemplo, el primer hijo suele ser el más deseado, y sobre el que se vuelcan todos los ideales de los padres y de los abuelos. Esto puede condicionar que se tengan expectativas poco realistas acerca de la paternidad y la crianza.
Además, la lógica inseguridad de ser padres “novatos” suele llevar a múltiples consultas con familiares, médicos, etcétera… antes de tomar decisiones. Una inseguridad que puede conducir a la sobreprotección.
Luego, cuando los padres tienen el segundo hijo, ya no son las mismas personas que eran hace… 2, 3, 4 años. Ellos mismos han cambiado, y también lo ha hecho su vida, sus circunstancias, su propia experiencia como personas o como padres.
Por lo tanto, siempre habrá matices, aunque los padres deseen evitarlos. Porque, además, los niños son personas y cada uno es distinto de los otros hermanos, y su temperamento será diferente.
Un divertido hilo de Twitter explica, con mucho humor, algunas de las diferencias en la crianza de los hijos primeros, segundos y terceros. Con especial énfasis en lo que comentábamos más arriba: mientras que con los primeros pecamos de sobreprotectores, con los terceros puede ser todo lo contrario.
Hijo número 1 come arena de playa: Noche en urgencias
Hijo número 2 come arena de playa: Farmacia de Guardia
Hijo número 3 come arena de playa: El niño se va a la cama ya cenao…
— Yern🕳 (@yerno37000) June 30, 2019
Pobres de nosotros, los hijos número cuatro.
— Antisexista (@Cazafalacias1) 1 de julio de 2019
Hijo nº 1 qué ilusión, ya somos una familia
Hijo nº 2 qué ilusión, ya tenemos la parejita
Hijo nº 3 Ligadura de trompas o vasectomía.— El Fumador🎗🇷🇺🇩🇪🇧🇪🏴🇨🇭🇩🇰🇦🇷 (@bombers_man) 2 de julio de 2019
Hijo 1: chupete esterilizado cada vez que toca el suelo/ cuna/ persona/ ropa ajena/ mesa
Hijo 2: chupete esterilizado solo si se cae al suelo
Hijo 3: lavado de chupete con fairy cuando se cae al suelo
Hijo 4: lavado de chupete con fairy cada 3 o 4 días
Hijo 5:la mierda inmuniza— Española de PURA CEPA (@espanola_cepa) 2 de julio de 2019
Hijo número 1 se traga una moneda:
Noche en urgencias
Hijo número 2 se traga una moneda:
Esperas a que la cague
Hijo número 3 se traga una moneda:
Se la descuentas de la paga— Everybody (@pauhummer) 1 de julio de 2019
Niño 1: purés orgánicos hechos en casa con verduras del estante eco-bio.
Niño 2: potito manufacturado
Niño 3: come ganchitos del suelo del coche. El más sano de los tres. A prueba de bombas.— A. Aivar (@aivarabogado) 1 de julio de 2019
El primero lo cría el pediatra; el segundo la madre y el tercero se cría solo ( dicho de toda la vida)
— Gema (@Gema12121212) 1 de julio de 2019
Hijo número 1 Ropa nueva de temporada..
Hijo número 2 Ropa del hijo número 1
Hijo número 3 misma ropa del hijo número 1— Quehaydelomio❤️💛💜🏳️🌈 (@Quehaydelomio4) 2 de julio de 2019
Una amiga con 3 hijos tenía su propia teoría:
Hijo número 1: ¡¡¡ Se rompe !!!
Hijo número 2: No se rompe.
Hijo número 3: Rebota.
— Crystal 🏴☠️ (@xtal_b) 1 de julio de 2019
Eso lo decia una amiga con los chupetes cuando se caian al suelo. Con el primero, a hervir al milton. Con el segundo, remojón bajo el grifo. Con el tercero, rechupeteo en boca materna y arreando.
— Miss Mae (@La_Montebosco) 1 de julio de 2019
Yo solo tengo uno y he hecho todas las marranadas. Si hubiera tenido tres, el último habria sido un marine por lo menos.
— Rosa (@jyrs00) 1 de julio de 2019
Hijo1: 4 discos duros de fotos, raw y jpg alta calidad.
Hijo2: las fotos que haya en el móvil.
Hijo3: las que le hacen en el colegio para fichar.— Manlezl (@Manlezl) 1 de julio de 2019
Hija número 1 se mete tremendo hostión al caer de un terraplén: le metes un tortazo y pa casa.
Hija número 2 se da un cabezazo contra la esquina de la mesa: pa urgencias
Perro se rasca mucho la oreja: al veterinario corriendo
— Lana 🇪🇸🇮🇱🇺🇸🏳️🌈🏳️⚧️ (@MarineTortuga) 1 de julio de 2019
Hijo1 – 3 gotas de pis en el pañal para cambiarlo.
Hijo2 ,hasta que no pesa medio kilo el pañal no se cambia.
Hijo3,hasta que no se sale la mierda por los lados no se cambia.Con la típica frase de "va,no es casi nada,habrá sido un pedete".— Pedrito RM (@Since1983Madriz) 1 de julio de 2019
Hijo 1. Pones termómetro en el agua de la bañera.
Hijo 2. Metes la mano en el agua de la bañera.
Hijo 3. Metes al niño. Si no está a la temperatura correcta, lo sabrás!— Carmen mataran (@Casaura) 1 de julio de 2019
Hijo 1: ¿Te has caído? Ay angelito, a ver, dónde te duele? Sana sana culito de rana…
Hijo 2: ¿Te has caído? Así aprendes, venga, arriba y pa casa…Así todo…
Si tuviera un tercero sé perfectamente que lo suelto en el jardín a que se crie salvaje 🤣🤣
— Eva 🌺 (@ecarolor) 1 de julio de 2019
Para aprender a nadar en la piscina:
Hijo 1: estoy contigo y te sujeto por debajo
Hijo 2: te metes con los manguitos, y apáñate tú solo
Hijo 3: te lanzo al agua como un pedrolo mientras desde el borde digo "Qué bien buceas😍😍😍"— JUANMA RUBIO 🗻🚴🌞 (@JuanmaRubio8) 1 de julio de 2019
¿Qué os parece a vosotros?